Párate y respira,
párate
 en esta aceleración de acontecimientos
 internos-externos,
 párate,
 no una vez,
 sino a cada instante,
 y déjate……
déjate estar ahí…..
en ese vacío,
 silencioso,
 en donde el legado de lo que eres se expande,
 aquí,
quédate aquí,
 una y mil veces.
Presencia amorosa,
 consistente,
 donde el Cielo y la Tierra se encuentran en ti,
 en tu única y singular forma de humana Tierra!!
 Párate y quédate, a cada instante.